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viernes, 22 de febrero de 2019

diseccionando canciones (I)




Esta ocasión he querido escribir sobre las dos canciones que más he estado escuchando en lo que va de este año, canciones muy distintas, pero que tienen un hilo conductor en común. Ahora que no tengo mucha cabeza para escribir sobre otras cosas (al menos no en el blog), he querido hacer este ejercicio que no había hecho hasta ahora.

"No te preocupes por mi" de Leiva, y "Los años maravillosos" de los Little Jesus son las canciones a diseccionar. Cualquier persona que las escuche podrá leer en una primer lectura que habla sobre amor, un amor complicado, tormentoso, que se sufre de cierta manera por sentir, los que le rasquen un poquito ´más a una simple lectura convencional pueden incluso leer en ambas, cuestiones adictivas, nocivas, tóxicas; no sólo en una cuestión de relaciones personales, sino en cuestión de sustancias (drogas, pues), pero una tercera lectura se puede dar de cada una de las canciones una vez que se ve el videoclip de cada uno. No sé si se hizo por el simple hecho de realizar un video diferente, por subirse al tema de lo trending topic, o si lo refleja como tal, pero la lectura que se le puede dar a ambas canciones en el video es sobre un amor gay.

Empezando por la primera mencionada, la letra al empezar da la impresión de ser una confesión, una persona habla con otra (puede ser un amigo, su "pareja" o su psicoanalista) sobre esta relación que lleva. Habla sobre esta persona que es diferente y que nadie entiende, pero habla de su doble sentir: como el frenesí que siente y que tanto le gusta sentir lo hace sentir sucio, culpable, en palabras mismas de la letra, "un cerdo". Él se confiesa de bajada, sus rachas no han sido buenas en mucho tiempo, pero dice a su interlocutor que a pesar de todo lo complicado o deprimente que pueda escucharse la confesión "no te preocupes por mi", ya que ha estado anteriormente en esta situación, no se explica si con la misma persona o con otras. Y remata con la confesión total: "te juro que esto no es lo que parece", pareciera una relación con otra persona, una chica, pero luego dice: "todo cambia, nada permanece". Evidentemente dice que con "esa" persona el es otro, quizá quien es de verdad.

En Los Años Maravillosos de Little Jesus la primera lectura es muy clara, incluso con el video: habla sobre un par de amigos que prueban por primera vez una droga, se puede asumir que por la corriente Skate y los síntomas que nos describe la primera estrofa de esta, es marihuana. Pero es cuando sigues escuchando la letra se puede dar como lectura otra droga más fuerte, y más dolorosa: el amor. El amor que se da luego de que estos amigos experimentan por primera vez. Frases como "cambió todo en nuestras mentes", "no te quiero volver a ver, quédate para siempre en mi mente", "tú y yo somos iguales, no nos pueden detener"; habla de esta sensación de aceptación y no aceptación de lo que se siente.

Como sea, ya sea que la letra se refiera a esta clase de amor o no, el video explota esto, se le puede dar esta lectura de un amor entre personas del mismo sexo, un amor homosexual, pero ya saben lo que pienso, el amor es amor, y no se etiqueta. Los videos son geniales, para su bien, y funcionan, no como una forma de vender, o por lo políticamente correcto. Ahí se los dejo para que los vean. Y escuchen tan buenas rolas.







Pd. También les dejo las dos rolas que estoy escuchando en estos días, por si están faltos de material.






2 comentarios:

  1. Buena (di) sección.
    De todo esto sólo conocía a Kevin Johansen, el único tipo que conozco nacido en Alaska.

    Abrazo!

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