Producciones "La Vieja Escuela" Presentan:

domingo, 25 de agosto de 2024

Breve comentario sobre “Las chicas están bien” de Itsaso Arana





Tiene todo el sello de Los Ilusos, y se ve que Itsaso tiene, al igual que Jonás; cierta influencia y esencia de argentinos como Piñeiro (en este caso particular, de dos películas [un largo, un medio] en preciso que para los conocedores del cine del Matías podrán identificar inmediatamente) y Llinás.

En muchos sentidos es una película sencilla, con pocas cosas, pero trabajadas de una manera comprometida. Hay poco arte, pero qué arte. Es una película que juega e involucra al espectador en su juego, el que Itsaso haya dejado a sus musas ser ellas en la ficción, funciona perfectamente, no vemos línea divisoria entre realidad y ficción, y eso siempre es arriesgado, pero Itsaso logra la magia, y no dudo se deba en algo a la guía que pudo recibir de Jonás, quien produjo la película y estuvo como supervisor en jefe de la postproducción. 

Inquietudes de la vida y de la muerte, del amor y de ser mujer (hay un halo de Bergman en todo esto), y aunque evidentemente hay un halo feminista en estos diálogos entre mujeres interpretando personajes y siendo ellas mismas a la vez; no se nota como lo elemental, o una especie de manifiesto, ni mucho menos algo panfletario y vacío; son mujeres, son ellas hablando de sus temas, y uno queda maravillado de la naturalidad y realismo del guion de Itsaso, que aunque muchas veces pareciera todo es espontáneo y nada ha sido escrito, hay un trabajo impecable desde la historia escrita lo que hace que todo parezca espontáneo y real, y seguramente en ese sentido se vio influenciada de otras historias escritas por mujeres. 

Y si bien en el plano actoral Itsaso es la más débil del maravilloso cast que tiene (cabe mencionar, 5 actrices protagónicas [Bárbara Lennie, más encantadora que nunca, y jugando como nadie, y creando un par de momentos hermosísimos junto con Itsaso en la historia], tres personajes secundarios, una escena con muchos extras y un sapo es lo que comprende la película), en su debut como directora nos hace saber que podríamos tener una directora de la talla de la mismísima Carla Simón. Y que buen atino tuvo Itsaso en ese título alternativo: “Ensayo de una película-ensayo”. 

Resumo: me ha gustado mucho, mucho.

sábado, 24 de agosto de 2024

10 años de Producciones “La Vieja Escuela” Presenta:




Por Heidy Cásarez


110 años después y 3 días antes del nacimiento de Julio Cortázar, y bajo la misma errancia geográfica que el Cronopio mayor, el crítico y realizador cinematográfico, así como fotógrafo, poeta, narrador, caminante y sintiente, Juan José Antuna Ortiz, bajo el influjo de la amistad y con la vena escritural del cine, la literatura, la música y el arte, un día como hoy, 23 de agosto de 2014, dio origen a Producciones La Vieja Escuela Presenta: un Blog que va más allá de ser un blog y un medio de publicación pues con entereza, sensibilidad, sapiencia y emociones variopintas, desde su sincera, sensible y puntual pluma, acerca a sus lectoras y lectores sí a la crítica, sí al análisis, sí a la reseña, pero, ante todo, a lo que sus emociones le dan forma, compartiendo eso que vive al ver, al leer, al observar, al escuchar y al vivirse.
Producciones la Vieja Escuela Presenta: es ese sueño que muchas y muchos seguimos teniendo: generar y alimentar un espacio en donde no sólo se aloje la voz propia sino la de las y los demás; en donde el hogar de las palabras sea confortable y digno; en donde la palabra sea signo, significado y referente, movimiento y desplazamiento, viaje y destino, búsqueda y encuentro.

Así, por todas esas palabras y su elocuencia; por todo ese incansable brillo que nos regala con cada uno de sus textos, así como por todo lo que ha generado en esta década, abrazo con todo mi corazón a Producciones La Vieja Escuela Presenta: por las lecciones, por el aire fresco, por la delicadeza, por la congruencia entre palabra y acto; por hacernos parte de esos momentos vivos que no son otra cosa que actos de amor en donde el cine, la literatura, la musica y el arte son los motivos pero también los conductos.

¡Feliz 10mo. Aniversario a mi tan querido cómplice, amigo y compañero @johnnyantuhap por darle vida y toda el alma a este refugio en donde la palabra es movimiento y manifiesto; idea y devenir!

Bendecida y afortunada soy de pertenecer a sus filas textuales y emocionales; de caminar al lado de un maravilloso ser que con su ser emociona y mueve y engrandece mi ser.
Toda la vida a Producciones La Vieja Escuela Presenta:. Todo el amor. Toda la luz. Todo...

miércoles, 21 de agosto de 2024

Breve comentario sobre “Un amor” de Isabel Coixet







Una casa, un perro, una propuesta. ¿Qué es un amor?

Realmente me dejó sacudido la más reciente película de la Coixet, de la que yo podría decir que siempre que saca una película, podríamos estar hablando de su mejor película, y en ese sentido para mí esta podría ser su mejor película hasta ahora, pero también podría serlo cualquiera de sus anteriores. Pero estas palabras en mi boca podrían no tener mucha valía, pues yo el cine de la Coixet lo amo desde el principio y para siempre. 

Cosas técnicas a notarse y comentarse podrían ser el trabajo fotográfico, la atención al detalle, la finura y puntualidad en observar y enfocar a conciencia y de manera perfecta la mirada de ella. Cómo los colores primarios que maneja su paleta, influyen mucho en la historia, su desarrollo y lo que vive Nat, que va de la obsesión, al sacrificio, al sufrimiento. A vivir en un lugar que en apariencia le iba a venir bien a pesar de las pericias, pero que al final se encuentra en un ambiente opresor, falso, hipócrita; cuando ella lo que buscaba en muchos sentidos ella quería remediar y arreglar, incluso corresponder y dar un poco de lo que no pudo resolver y aportar en su vida pasada. De ahí que se empeñe en salvar al que todos dicen que es malo, el que ella sabe que con oportunidad y amor, puede ser bueno a pesar de su apariencia, ahí es donde encontramos al verdadero co-protagonista de la historia, ese que nadie creería que podría ser, ese verdadero amor, ese que nos devuelve un poquito de lo que nosotros le dimos, cuando quien esta hecho mierda es uno, un poco como encontramos al otro, un amor cuyo destino no puede ser otro mas que el perderlo. 



Laia Costa está sublime, ha sido una verdadera bendición desde mi perspectiva que Coixet y Laia se hayan encontrado en esta vida laboralmente hablando, desde la grandiosa “Foodie love” se notó que estas mujeres juntas, harían cosas realmente extraordinarias. Me parece que Laia no da nota mala desde su debut protagónico en “Victoria” (Sebastian Schipper, 2015), que si bien algunos de los proyectos en que ha participado no son del todo buenos, ella cumple con creces, y un poco que salva la película con su sola presencia. A Hovik Keuchkerian sólo lo he visto en dos cosas serias (su aparición en “The night mánager” no la podemos contar, ahí sólo figura como “extra”) y tiene muy buenas maneras. Otra actuación muy importante es la del actor Luis Bermejo que es el más despreciable de los antagónicos que yo haya visto en mucho tiempo, en la figura de “el arrendador”. 


Muchos podrían creer que el final está desmedido, o incluso fuera de lugar, pero no me lo parece, sólo hay que recordar películas como “Zorba el griego”, “Druk”, “Corsage” o incluso “Spencer” no en su escena final, sino en la escena donde corre. Incluso a mí me provocó sensaciones muy parecidas a las que me hace sentir el cine de Chang-dong y Sang-soo. 

lunes, 12 de agosto de 2024

Breve comentario sobre “Tres hermanos”





La película nos revela desde un principio el discurso que pretende explorar y que hasta cierto punto expone de manera correcta, además del magistral trabajo fotográfico y como de manera muy simbólica muestra la importancia que tendrá la naturaleza en el desarrollo de la historia; y ese discurso que explora y expone la trama que se desenvuelve en el guion del propio Francisco Paparella, es el de la violencia. Más aún en particular, el de las violencias masculinas.

Las violencias que ejercemos sobre otros, las violencias que ejercemos sobre nosotros mismos, las violencias que ejercemos por demostrar que somos hombres, las violencias que ejercemos con tal de no sentir vulnerabilidad, las violencias que ejercemos para no sentir remordimientos, las violencias que ejercemos para no pensar en el pasado. 

La forma en que se dota a estos tres hermanos de un sufrimiento particular que pretenden tapar con actitudes machistas, pero que se destapan cuando el hermano mayor regresa a la casa de los padres, y esto empieza a hacer que cada uno de ellos muestre su verdadero rostro y se quiten la careta para luchar con sus demonios, el más chico queriendo violentar a través del ruido, del sexo y de la fuerza para reprimir los deseos que le suscitan las luchas grecorromanas y los sentimientos que le despierta su mascota, el mediano que carga con la responsabilidad de llevar a cuestas el legado familiar y que hace todo por subsistir, y que ha raíz de un diagnóstico hace que manifieste su hombría de la manera más ruin, y que quizá sea la consecuencia de su desenlace, y el exilado que a su regreso lucha con el origen de los males de los tres: la inexplicable muerte de su madre, y los maltratos que ejerció su padre sobre ellos, y que trata de reprimirlos con el abuso de droga, además del propio hecho de luchar con su propia ausencia siendo padre. 

Un estudio de personajes que de alguna manera expone que no importa cuál fuerte sea la avalancha, con algo de perspectiva se puede ver y trabajar sobre lo mal que hemos hecho como seres humanos, o quedarnos estancados tratando de enterrar todo con ruidos estridentes y golpeando y sometiendo lo que esté a nuestro paso, hundiéndonos cada vez más en ese pozo que más temprano que tarde, nos dejará sin luz. 

jueves, 8 de agosto de 2024

Breve comentario sobre “Joyland”





Como que quería esperarme un poquito para escribir sobre “Joyland”, pero creo mucho en las primeras impresiones y lecturas, y esta película me hizo sentir una cosa que espero poder expresar de manera muy sintetizada al final. Que ya después tendré tiempo de sobre para poder escribir elaborar un texto más extendido para esta película que además de sorprenderme gratamente, sin duda alguna debe estar como mínimo en mi top20 de los mejor que he visto en este 2024. Recalcar además que si la película (del año 2021, por aquello de recalcar cosas y hacer patente lo difícil que es traer para las pequeñas distribuidoras nacionales buen cine de medio oriente) tiene la relevancia que tiene, además de por la gran valía que tiene por sí sola; es por el hecho de ser la primera película paquistaní en estar en Cannes (Una cierta mirada, ganadora del Gran Premio del Jurado), y ser preseleccionada en los Oscares (además de contar entre los productores ejecutivos con el reconocido actor inglés de ascendencia paquistaní Riz Ahmed). 

Para empezar, debo decir que Joyland se siente como un collage de muchas cosas valiosas, que sin duda Saim Sadiq (director) quería explorar. Todo el trasfondo de la trama corresponde a un marco social en Pakistán, sus cosas buenas, tradicionales, de las cuales sentirse orgullosos, pero también el rigor con que se tocan ciertas cosas, condiciones y forma de vivir hoy día, ya con más conciencia de libertad. 

Joyland me parece, así como tiene muchas subtramas que van desde lo familiar, el amor, la depresión, la jerarquía machista en medio oriente, la discriminación; también tiene por momentos más de un personaje protagonista, o quizá solo tengamos una, y no es la que creemos, y que hace que el título de la película tenga mucho sentido. 

Mi título alternativo para esta película sería: “La fierecilla durmiente” y creo le viene perfectamente en más de una ocasión, por más de una razón, a más de un personaje. Tiene momentos mejor desarrollados que otros, sin duda alguna, pero hay una propuesta realmente interesante en el montaje que viene desde la utilización del sonido para desorientar o poner foco sobre ciertas situaciones de manera muy abrupta (esto sobre todo al principio de la película, que a uno lo hace dudar si hay un “por qué” detrás de esto o son errores), hasta lo visual que juega con luces, planos y posición de cámara por momentos de manera Meli suma, y por otros tantos de manera abstracta, poco ortodoxa. 

El final, además de hermoso, aún con la tristeza que da; me parece que, además de ser uno de los más bellos que he visto en el año, arroja lo que para mí es esta película: la vida misma, que nos somete, pero aún así nos dice de manera muy tajante pero silenciosa: habrá que salir a vivir, a cumplir esos sueños. Por quienes ya se fueron, por quienes no están más a nuestro lado, por quienes no pudieron ser; pero sobre todas las cosas, por nosotros.

miércoles, 7 de agosto de 2024

Breve comentario sobre “20000 especies de abejas”





Si bien, los muy sutiles paralelismos de la película de Estibaliz con "Totem" (Lila Avilés, 2023), sería una razón más que suficiente para que esta película se cuele como una de mis películas favoritas de este año, hay muchas razones más para así pensarlo.

Hay una exploración por parte de la directora para hacer un ejercicio de exploración y reconocimiento de su personaje principal, a partir de las dinámicas familiares que se suscitan en la complejidad de la condición humana. También implica mucho el choque de lo que es volver al nido, lejos de la ciudad que dicta muchas de nuestras comodidades, para sumergirnos en los demonios y frustración de la vida a campo abierto, en lo rural (un elemento que por supuesto también me hace recordar a Carla Simón, y la particular película "El reino de dios" de Claudia Sainte-Luce), como en mayor espacio, hay más opresión, para quien busca identidad, para quien la perdió y no puede o sabe apoyar a quien quiere ser, fuera de lo que los otros le dicen que es, cosas que se heredan de generación en generación cuando no se trabajan y se rompen patrones.

Las mancuernas actorales en los puntos más tensos y dramáticos en la historia son realmente extraordinarios, la expresividad que hay en sus miradas, en sus silencios, una clase magistral la de las actrices. Patricia López, Itziar Lazkano, Ane Gabaraín, y por supuesto la infante Sofía López, hacen toda la película, bajo el pulso emotivo y emocional que crea Estibaliz con su historia. Una película que realmente vale la pena.

Breve comentario sobre “Fuego Interior”


“Fuego interior: Requiem para Katia y Maurice Krafft “


Si tuviera que resumir en una palabra la más reciente película del siempre virtuoso genio alemán Werner Herzog, sería: “solemne”. 

Para los que conocemos parte de la obra que está dedicada a este par de vulcanólogos tanto en lo cinematográfico, como en lo literario; coincidimos totalmente con Herzog en el hecho de que otro trabajo biográfico sobre esta famosa pareja, quizá estaría demás (como el muy vigente “Fire of love” producido por National Geographic y dirigido por la joven realizadora Sara Dosa, que también es un interesante ejercicio, pero de índole más melosa), de modo que el primer gran atino de Herzog son las claras intenciones de la realización de este trabajo, que no busca más que rescatar las hermosas imágenes que tanto Katia como Maurice registraron, pero también un ejercicio de la comprensión de todo lo que se arriesgaron en aras de lo que más amaban en la vida además de compartirse en todo, y en el acto haciendo un ejercicio de memoria de todas las veces que estuvieron en latente riesgo de morir, y en el acto vieron e hicieron que de meramente científicos, se convirtieran en humanistas.

Hay un momento del documental en que Herzog dice que hay una especie de alivio para el espectador en poder ver desde la distancia que el cine permite, todo lo que ellos vivieron y atravesaron en vida (con un par de canciones de Ana Gabriel, en cuya primera aparición se hace una especie de homenaje sí al spaguetti western, pero desde mi perspectiva, más al trabajo literario y fotográfico del México particular de Juan Rulfo) pero lo cierto es que uno tiembla y siente una conmoción terrible y tremenda cuando vemos por ejemplo las imágenes del volcán de Colombia, al ver al ganado enterrado y los cadaveres calcinados en casi primer plano. 

Este réquiem fantásticamente musicalizado, con la atinada narración del propio Herzog, y las alucinantes imágenes del archivo de los Krafft, hacen que descubramos el tercer motivo por el cual Herzog realiza esta suerte de homenaje found footage: ver la transformación de dos vulcanólogos a documentalistas, cuyo registro es invaluable, el mismo Herzog lo dice casi al final: Maurice se convirtió en un cineasta que registraba y capturaba imágenes que sólo podríamos imaginar y ver en nuestros sueños, la danza del ímpetu, la belleza y el poder de destrucción de la naturaleza, y un muy merecido réquiem a dos amantes que murieron como sólo ellos podrían morir, como el propio Maurice lo vaticinó. 

Sin lugar a duda, uno de los más mejores y más hermosos documentales del año, y otra puntada de uno de los directores más importantes del cine hoy por hoy, que tanto en ficción como en documental sabe envolver a cualquier espectador, envolverlo en eso que emana del interior hacia afuera.

“Valentina o la serenidad” de Ángeles Cruz.





El primer pensamiento que me ha venido a la mente al terminar de ver la película y darme cuenta que toda y todo espectador que estaba en la proyección se quedó hasta el final de los créditos, fue: “Qué bonita película”. Y si, evidentemente es una bonita película y me hace darme cuenta de algo que ya venía pensando sobre Ángeles Cruz desde sus cortometrajes: va siendo a mi parecer una de las voces más interesantes, importantes y valiosas del cine mexicano. 

Hay que empezar diciendo, que la película empieza siendo claramente una película infantil con un aura muy peculiar y particular que además hace que uno recuerde algunas películas muy bonitas realizadas por comunidades originarias del sur de México, como “El sembrador”. Y si bien, los primeros minutitos surgen ciertos detalles (negativos a nivel producción, desde mi perspectiva) que nos revelan la naturaleza del reparto amateur y la utilización de la música como un agente de los estados emocionales de los personajes y cómo se pretende que nosotros los somatícenos, después los valores se empiezan a nivelar y a partir del momento que determina la condición de Valentina a lo largo de la película, todo va en ascenso. 

Toda la obra de Ángeles va sobre las emociones tan particulares que las personas desarrollan desde el dolor, el abandono y el rechazo, tanto físico como emocional, en el centro del lugar de origen o en la distancia estando lejos de la tierra que nos vio nacer. Trata temas como la tristeza, la alegría, la desesperanza y la esperanza (puntos extremos o contra polos de cada situación), pero también del exilio al que nos someten, y en ocasiones también ese exilio auto impuesto por necesidad, que es un tema que particularmente la gran mayoría de comunidades originarias no sólo del país, sino de toda América latina podrían verse reflejadas, y en ese sentido la historia de esta película no es la excepción. Dicho en otras palabras: tiene temas recurrentes, es una autora en toda la extensión de la palabra. Siento que la universalidad de esta historia puede tocar a cualquier ser humano, por ejemplo, no me cuesta nada confesar que yo en algunos momentos de mi vida me he sentido como Valentina, ese deseo de buscar al prójimo, de tratar de alcanzarlo al lugar en donde esta, cueste lo que cueste tanto metafórica como literalmente. Que es el cine sino un espejo en el cual identificarse. 

A mí parecer la película pudo haber llamado “Valentina o la tiricia de las infancias”, o “Valentina o las distintas formas de duelo que las infancias experimentan”. 

Los paisajes que comprenden la cotidianidad de Valentina, y su madre, y Pedro (tremendas y conmovedoras actuaciones en particular de ellos tres), la música de intérpretes de la comunidad que en verdad es preciosa, y toda la carga simbólica de la comunidad en que se hace la película, así como las personas que viven en ella y también participan en la película, forman un cuadro del cual es imposible no conmoverse. Además, técnicamente hablando la película es perfecta, la coordinación de la acción en cada escena, los elementos literarios en los diálogos y en el guion que reflejan la sabiduría de estas regiones y su conexión con todos los elementos de la madre Tierra. Encuadres y desplazamientos de cámara finísimos, por supuesto acompañados de un trabajo redondo en cuanto a iluminación y cinefotografía. Obviedades que forzosamente hay que mencionar para enriquecer el texto como el gran y sutil trabajo que se hace desde el diseño de producción, la coordinación de reparto y extras, una película grande en su sencillez, y mesurada en su grandeza, y que fue apoyada tanto por el estímulos federales como por festivales como Toulouse y el Vancouver Latin American Film Festival.

No sé si de acá a diciembre, terminará siendo mi película mexicana favorita del año, pero de que esta en la lista, estará.

Breve comentario sobre “Pequeños peces”





Lo primero que podría decir sobre la película de Joong Ha Park, es que hay que tenerle mucha paciencia al primer acto, ya que es difícil comprender las intenciones del director en el que lo único que tenemos bien determinado, es que en algún momento su única locación terminará teniendo un papel predominante en la trama, pero una vez sorteada esa frontera, lo que viene es un ejercicio impresionante sobre la importancia del desarrollo de una historia y sus personajes que se van descubriendo capa a capa y sin prisa alguna, o una narrativa o ritmo que aligere los picos dramáticos que oscilan en todas las direcciones como si fueran las lecturas de un sismógrafo, sino que para eso está una comedia puntual que nos trata de tú a tú, con respeto y como seres pensantes. 

El guion apremia a la trama del argumento, en los simbolismo, sus claves, y el camino de migajas que va dejando para que el espectador sepa distinguir y sea parte (acá una vez más una prueba de respeto), pero sobre todo apremia a sus personajes, mostrando con toda la complejidad posible sus miedos, sus intenciones, sus conjeturas, como lo que para uno puede ser el éxito, para el otro puede ser la insignificancia, y viceversa, o dicho en otras palabras: pequeños peces queriendo estar en estanques grandes, o peces grandes que no se dan cuenta que están en el estanque de los pequeños, en fin; aprendiendo, intentando pescar la otra oportunidad en la vida, una más grande de la que ya han tenido en la vida, encontrándose y encontrando a otros en ese camino de intenciones e intentar. No por nada el guion de esta película ha sido tan mencionado y laureado. 

Más que una película, se siente como los ensayos o el intento de la idea de una película, que en el proceso se descubrió siendo otra película, la que ahora tenemos, la que ahora es. Producida y co-escrita por Howon Kim, actor que interpreta al personaje más importante de los tres protagonistas que llevan el pulso de toda la película, y es bastante claro el por qué.