martes, 7 de agosto de 2018
Las diez películas que yo considero cambiaron mi vida.
Este es un ejercicio al cual me invitaron a colaborar en Facebook, el cual consistía en compartir los carteles de las diez películas que han cambiado nuestra vida, esto sin dar explicación alguna del porque las considerábamos así, de modo que yo quise extender un poco más el ejercicio y acá voy a dar la explicación a cada una de las películas del porque yo considero cambiaron mi vida como espectador.
La mayoría considero que la cambiaron más que nada en la visión de como veo el cine, como lo concibo, y que han hecho que busque ver precisamente esta clase de cine, y una que otra supongo a la larga si han hecho que cambie algunas cosas de mi vida ya en un plano más profundo, pero no la gran mayoría.
Sin más preámbulo en esta introducción les comparto las diez películas que cambiaron mi vida.
El Rey León.
La primera película que yo siento que marcó mi vida fue esta. Quizá si me pongo a hacer un recuento de las películas animadas que más me gustan, que honestamente son muy pocas, no por falta de calidad en esta clase de trabajo, sino simplemente porque así es conmigo, creo que esta lideraría dicha lista.
Fue la segunda película que yo vi en el cine, y al ser la primera en dibujos animados, de tanta duración (vamos, con esto quiero decir que las caricaturas que miraba en la tv eran de menos de 30 minutos) fue más especial para mi, sumando a eso el hecho de que el protagonista muere casi al inicio de la cinta, y que años más tarde sabría que es una adaptación más a la magnánima obra Hamlet de Shakespeare, creo que no hay nada más que decir.
Stand By Me.
Cuanta conmigo quizá sea la película que yo más recuerde de mi infancia, por encima de la que me digan como Cementerio de Mascotas, Pesadilla en la Calle del Infierno, o Nuestra Pandilla (sobre esta última sólo por muy poco) Y creo la recuerdo mucho, y con mucho cariño por el hecho que me hace recordar muchas vivencias similares que viví con muchos de mis viejos amigos de aquellos años, en primer lugar; y en un segundo lugar porque fue la primera muerte que yo vi y que me impactó mucho, ya había visto algunas otras en películas, pero eran en películas de terror (hago un recuento mientras hago este ejercicio y me pongo a pensar que de niño si me gustaba ver películas de terror, cosa que hoy día no tolero) y en esta el ver que era un niño, y retratado de una manera muy real, nada estrafalaria o dramática, creo que si dejó algo en mi, como si ese niño podría ser yo.
Naranja Mecánica.
Descubrir esta película en la prepa por el hecho de escuchar a mis amigos hablar tanto de ella, fue sin duda abrir una puerta, cambiar el switch a todo lo que yo concebía que podía hacer el cine, ya no era sólo entretenimiento, o si bien si entretenimiento; ya no sólo para quemar tiempo, desperdiciarlo, ahora podía entretenerme planteándome preguntas durante la película, y después de la película, comprendiendo que las películas eran algo así como los libros.
El Padrino.
Con El Padrino fue más que nada la comprensión que hay personajes en el quehacer del cine que son tan importantes como toda la película. De esta película lo que me cambió fue la perspectiva hacia los actores, y lo grandes artistas que pueden llegar a ser, como el señor Marlon Brando. Me enseñó a buscar películas a través de este método, el de filtrar por actores.
Amelie.
Para muchos quizá no sea la mejor obra de Pierre Jeunet, pero yo amo tanto esta película, y tiene un significado para mi como no tienen idea, que son un sin fin de causas por las cuales a mi me marcó tanto.
Para empezar diré, y esto si ya lo comenté acá en el blog en mi primera lista de películas favoritas y en la entrada que escribí sobre la película hace ya 4 años, que es la película que me hizo querer buscar más cine francés, que a su vez me hizo querer conocer más el cine europeo completamente, también la considero como la película que me hace como tal un cinéfilo, no sólo un fanático del cine comercial.
Ahora, lo que pocos saben sobre mi amor por esta película es que gracias a ella yo conocí a Eric Villa, quien es coordinador editorial de la revista para la que colaboro, Cinéfagos, y fue precisamente el primer número que yo leí sobre la película en el que escriben sobre ella, y de ahí nacieron mis ganas de querer colaborar con ellos. También un dato muy peculiar sobre la película es que cuando yo la vi por primera vez en la vida, fue en el 2012, año en que cumplí 23 años, la edad que tiene Amelie en la cinta (como olvidar la escena donde pasan en la tv su muerte) y por último esa escena en la que imagina que su amado sale a comprarle levadura, esa escena fue la que me hizo comprender que el cine provoca sentimientos reales, no sólo emociones, o risas, o sustos, o diversión, también te hace feliz en plenitud, te hace sufrir, llorar con esos personajes con los que te puedes identificar y ver tu propia vida ahí, personajes reales y no indestructibles. No creo honestamente ver una película en vida que me de la gracia y la plenitud que me da Amelie cada vez que la veo.
(Por cierto, nunca me ha gustado del todo el poster)
Midnight In Paris.
La película de Woody Allen también la vi en el 2012, y si en algo cambió mi vida esta película, y si algo de puedo adjudicar yo, es que gracias a ella yo empecé a escribir, a raíz de haberla visto y a la par de un par de sueños que tuve con unos meses de diferencia y algunas vivencias, nombres, libros y viajes, yo me animé a escribir mi novela, y años después supongo gracias a eso también nació este blog, pero siempre he creído que el detonante principal de todo fue esa película, y acá sigo.
Azul.
Jamás se me va a olvidar la noche en que yo miré esta película, me dejó un sentimiento de vacío, pero a la vez de cierta alegría y anhelo, que pocas veces logro volver a sentir al ver una película, incluso recuerdo que me costó mucho volver a verla, por miedo a no sentir lo mismo, pero cada vez que la veo, me hace sentir lo mismo que aquella primera noche, es como una maquina del tiempo para mi. Me enseñó quizá no a sentir como Amelie, pero si me hizo tener cierta empatía por el sufrir de Juliette Binoche, a la cual si bien yo ya conocía de otras películas, y ya la amaba, creo que a raíz de ver esta actuación la elevé hasta la cima de mis actrices favoritas, incluso al grado de creer fielmente que es la mejor actriz que haya pisado este planeta, por encima de quien ustedes o las personas que saben de esto me digan.
La Dolce Vita.
Sin duda alguna otra película que me ha marcado hondamente es esta joya indeleble del italiano Federico Fellini. Pues en ella vemos al hombre que todos quisiéramos ser nada más y nada menos que por el mejor actor de todos los tiempos: Marcello Mastroianni.
La Dolce Vita es un retrato de la vida misma, vemos pasar el tiempo como pasa en la vida, sin pretensión alguna, haciendo del cine una extensión de dudas y complejos que cualquiera puede tener, lejos clasismos, aunque la película trate a una sociedad clasista y putrefacta en ciertos aspectos. Tarkovski nos dejó la poesía hecha vida e imagen, Bergman dudas e inquietudes provenientes de nuestros sueños y nuestro pasado a través del silencio, Fellini dejó al mundo lo parco de la vida fielmente retratado, y con eso le debemos mucho, todo.
Her.
Con Her simplemente la marca consistió en quitarme el paño de los ojos y ver que muy pocos somos los que aún podemos amar de verdad en esta era. No haré ningún comentario más porque probablemente me ponga a llorar.
La Gran Belleza.
Con La Gran Belleza fue un poco reafirmar mi ideología de vida, esa de ser más meditante y absorbiendo toda la belleza posible en mi interior y tratar de hacer algo con ella escribiendo, aunque nadie, o casi nadie lea jamás todo lo que escribo como el papa de Juan Antonio en Vicky, Cristina Barcelona, y ser tan hipster y banal en el exterior como me sea posible para que nadie descubra mis secretos y sufrimientos.
Me considero desde entonces un Jep Gambardela prematuro, además de que no creí encontrar a la par una obra como la de Fellini, la ya mencionada, pues a pesar de lo que todos digan, yo encuentro más similitudes entre esta y La Dolve Vita, que con 8 1/2
Saló, o los 120 días de sodoma.
No quise dejar de mencionar esta película porque como una mención especial porque es de las pocas películas que me creó un shock, un impacto que no sé si me marcó, o me cambió para bien o para mal.
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Me sumo con Stand by me, Naranja mecánica y Medianoche en París. Son grandes películas, que he vuelto a ver. Magistrales. La primera y la tercera por televisión. El Padrino es una memorable película.
ResponderBorrarHer no me convenció.
Hay películas que tal vez debería ver.
Saludos.
He escuchado muchos comentarios como ese sobre Her, mientras unos la amamos, a otros simplemente no llegó a conectar, en fin; sosas del cine. Por favor no dejes de ver las demás que menciono y no hayas visto Demiurgo, valen mucho la pena.
BorrarSaludos.