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Creo que lo primero que me gustó de ti fue tu timidez, pero fue tu curiosidad la que acabó por matarme. Me encantó que no te fijaras en mi, que me enamoraras a base de curiosidad. Me acuerdo mucho de tu sombrero gris, de tu amor por Casablanca, de aquello que siempre me decías sobre vivir siempre el momento, de no hacer recuerdos ficticios. Recuerdo mucho tu manía por besarme los dos lunares que tengo en el pecho. "Si pensara en ti te odiaría", es una frase que te gustaba decir mucho. Eras mi Rick Blaine; eras mi Humprey Bogart.
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Dese el momento en que es una entrada sin título genera misterio.
ResponderBorrarMe deja pensando...
Abrazo!
La timidez, la curiosidad y la capacidad de asombro, todas ellas me encantan.
ResponderBorrarUn beso, Johnny.
La falta de título imagino es la imposibilidad de poner un nombre propio 😉👍... No está mal, la persona se dará cuenta igual...
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